miércoles, 22 de junio de 2011

CISNE NEGRO de Darren Aronofsky

TÍTULO ORIGINAL: Black Swan
AÑO: 2010
DURACIÓN: 109 min.
PAÍS: Estados Unidos
DIRECTOR: Darren Aronofsky
GUIÓN: John McLaughlin, Mark Heyman
MÚSICA: Clint Mansell
FOTOGRAFÍA: Matthew Libatique
REPARTO: Natalie Portman, Mila Kunis, Vincent Cassel, Winona Ryder, Barbara Hershey, Christopher Gartin, Sebastian Stan
PRODUCTORA: Fox Searchlight Pictures
GÉNERO: Drama. Thriller.



Con Pi El Orden del Caos (1998) Darren Aronofsky hizo que su servidor alucinara durante días ante notable y arriesgado ejercicio cinematográfico que contaba con una historia cien por ciento metafísica y una plástica acojonante, posteriormente con Réquiem por un Sueño (2000) quede fascinado ante el pesimista relato de yonkis que vivían sus propios infiernos personales y se autodestruían. Ya con La Fuente de la Vida (2006) el que esto escribe percibió que el director norteamericano trataba de abarcar demasiado y no llegaba a cerrar todas las ambiciones narrativas que se había planteado asi mismo, motivo por el cual (al menos un servidor) considero que este proyecto es el menos logrado del cineasta, sin embargo debo reconocer que este haya tomado el riesgo de realizar el mismo.

Y finalmente con El Luchador (2008) creo que Aronofsky vuelve a retomar el camino, enfocándose de nuevo a contarnos un relato más comprimido e incluso hasta minimalista por lo cual se despoja de toda esa parafernalia visual de su anterior obra, por lo que vuelve a centrarse en explorar la psique oscura del ser humano (la autodestrucción) mostrándonos en esta cinta a un Mickey Rourke en estado de gracia interpretando el papel de su vida como el crepuscular Randy “the Ram” Robinson, un exluchador de la WWE que ahora pelea fuera del ring para tratar de rescatar sus sueños rotos. Pues ahora, el arriesgado director vuelve con esta cinta llamada simplemente Cisne Negro, en la cual el realizador se vuelve a enfocar en ese tema tan fascinante que es la fractura emocional del ser humano (como en casi toda su filmografía), sin embargo ahora Aronofsky lleva la experiencia sensorial a niveles más oníricos y oscuros logrando por ende un film de verdad aterrador, pero macizo en todos los sentidos. 

La cinta abre mostrándonos a Nina (Natalie Portman) una bailarina de ballet que hace una de sus rutinas en un frío y lúgubre escenario cuando de pronto emerge entre las sombras un extraño ser antropomorfo con cara de ave que sin más ni más intenta atrapar a la mujer, instantes después descubrimos que todo ha sido una pesadilla pues la chica se encuentra acostada en su cama y despierta abruptamente (esta escena ya nos avisa lo que posteriormente sucederá en la existencia de la protagonista), después esta se prepara para partir a la compañía de danza en donde ha estudiado durante años.

Lo que no sabe Nina es que ese día no será común y corriente pues mientras esta se encuentra ensañando con el grupo de danza, Thomas Leroy (Vincent Cassel) dueño de la compañía ingresa al ensayo para escoger a los bailarines que formaran parte de la nueva puesta en escena de El Lago de los Cisnes, obra con la que el hombre tiene pensado levantar la agrupación ya que a últimas fechas esta no ha tenido la misma fama que en tiempos pasados, además de que Leroy también planea que con el relanzamiento de la obra pueda descubrir a la nueva estrella que ha de realizar la difícil tarea de interpretar el doble papel del cisne blanco y el cisne negro, al tiempo de que aprovechará para dar el último adios de los escenarios a  Beth (Winona Ryder) la antigua estrella.

Y es en este punto de la trama donde comienza el verdadero descenso a los infiernos por parte de la protagonista, quien en el afán de sobresalir para ganar el tan ansiado papel se ira autodestruyendo cuando la presión que ejerce Leroy (Cassel) para que esta se convierta en la estrella de la obra empiece a desquebrajar la endeble personalidad de la chica, al tiempo que dicha competencia representará ese catalizador para que las carencias emocionales, éticas, morales y sobre todo sexuales de Nina (Potman) salgan a flote descubriendo en esta su verdadera personalidad reprimida, la cual durante años a estado dormida a causa de la influencia que ha provocado vivir bajo el yugo de una madre castrante.

Como podrá leer el respetable el planteamiento argumental podría resultar algo ya visto infinidad de veces (el quiebre psicológico a niveles insospechados y lúgubres por parte del protagónico), sin embargo lo rescatable del film de Aronofsky no es como nos muestra el que si no el como, de ahí que incluso los aspectos más sórdidos y enfermizos que se presentan en la historia como son la representación de la fractura de la psique de la protagonista, por momentos se muestran de manera exagerada (la transformación de Nina en un cisne negro real se percibe por momentos forzado y reiterativo), empero estos logran salir a flote cuando el realizador vuelve a tomar el rumbo sobrio que nos venía planteando desde el inicio de la historia. Es por esto que incluso esa vuelta de tuerca que nos depara ese tercer acto final cierra de forma satisfactoria y contundente la tesis que planteaba desde un inicio el director norteamericano, además de que refuerza ese aire onírico que respira todo el filme.

Es por este motivo que la elección del casting es otro elemento fundamental para que la cinta funcione, pues el tratamiento de tan peculiar material argumental no trascendería si el realizador no contara con un reparto que entiende el mismo, de ahí que el rotundo performance que Natalie Portman desempeña aporta todo ese dolor y locura que la vuelven tan aterradora y a la vez tan fascinante pues innegablemente esta posee rasgos netamente humanos que la a tornan aun más perturbadora. Incluso los personajes secundaros estan tan bien construidos que se vuelven piezas fundamentales para que el personaje de Nina toque fondo y se convierta en ese cisne negro que cohabita dentro de si, por ejemplo la aparición de Lily (Mila Kunis) viene a ser la catarsis sexual que tanto coartaba, ya que esta al contrario de Nina se presenta como una mujer con libertad sexual  que además disfruta lo que hace.

Y finalmente Barbara Hershey, Wynona Ryder (en un papel bastante corto pero fructifero) y Vincent Cassel iluminan la pantalla con sus sobrias interpretaciones cerrando el círculo interpretativo. Asi mismo hay que decir que el film de Aronofsky implementa infinidad de simbolismos (el diseño del apartamento de Nina representa la condición psicológica por la que pasa esta ya que este se encuentra bastante constreñido en su esquema interior, además de que esta lleno de espejos los cuales sirven para jugar con la dualidad de la protagonista) los cuales reafirman el opresivo y por momentos surrealista relato, motivo por el cual se emplea una puesta en escena que incluye la implementación de una fotografía e iluminación naturalista, el uso de tomas subjetivas, asi como un manejo de cámara que recuerda mucho al estilo verité para dotar de más realismo la historia, logrando que visualmente el film sea una delicia y si a esto le añadimos la música Tchaikovsky pues la experiencia es acojonante.

Habiendo dicho esto creo que es indispensable revisar el Cisne Negro, ya que lejos de clasificarla como verdadero cine de arte e incluso como una digna cinta de Terror (que afán de poner en tal o cual contexto ciertas películas) creo que el mayor mérito de esta es que se descubre como un verdadero ejercicio cinematográfico, despojado de grandilocuencias (aspecto del cual cojeaba la mencionada La Fuente de la Vida), llena de pasión por parte del realizador y de los actores los cuales logran trasmitir dichas emociones. Además que dentro de los indiscutibles discursos psicológicos que plantea Aronofsky también podremos encontrar otros cuestionamientos como la existencia del propio arte como ente necesario en la sociedad, aunque este como otros aspectos humanos pueden consumir al propio hombre cuando no esta bien entendido.  

4 comentarios:

  1. La peli esta entretenida, eso ni como negarlo. Y todos sus comentarios tan acertivos como siempre Sr. Ronquillo, lo que si me encanto fue la musica...el unico detalle de esta peli,...por lo menos para mi,...es que no han pasado ni 5 minutos cuando a uno le viene la sensacion de "¿eso donde lo he visto?" y de repente viene a la mente la pelicula japonesa de ¿Satoshi Kon?...como se llama,...ho si Perfect Blue me cae que si la peli ubiera durado 2 minutos mas y nos ubieran puesto a la madre como la responsable de todo, me cae que es un plagio en descarado...simplemente el nombre de las protagonistas Nina y Mima (O_o) haganme el favor!!!!!!!!!!bueno, mi humilde opinion :)cuidese ronquillo y un saludo al George.
    atte: el Fesh

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  2. La película me pareció muy buena pero la sufrí bastante. Todo el tiempo sentía que algo malo estaba por pasar y finalmente (un tanto previsible) termina pasando.

    El director tiene una calidad artísitca en sus producciones que es indiscutible. Pi no me gustó tanto pero tiene una producción impecable. Requiem me gustó mucho más!

    Abrazo.
    http://moviespeace.blogspot.com/

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  3. Para el Buen Fesh.
    Creo que tiene mucha razón mi estimado Fesh, como bien acotaba su servidor es innevitable encontrar paralelismos entre esta obra de Aronoksky e infinidad de argumentos en otras cintas (por ejemplo yo encontre parecidos con La Pianista de Michael Haneke o La Compañia de Robert Altman por mencionar algunas)sin embargo como también comentaba, tal vez lo que da validez a la cinta del director norteamericano es sin lugar a dudas el como plantea su tesis, además de que cuenta con un excelente reparto. Finalmente quiero agradecer sus comentarios y felicitarlo por su gran conociemiento en el arte cinematográfico japones como es el anime, del cual se nota tiene gran dominio.

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  4. Para Cine de Casa
    Primeramente quiero agradecer por tomarse el tiempo en compartir sus comentarios y ya entrando en materia creo que si la cinta de Aronofsky es estresante, claustrofóbica y como bien menciona se sufre en su visionado, empero y reitero (sin defender lo indefendible) además de que coincido con ud. la cinta no podía terminar de otro modo razón por lo cual nos desprende un aire de dejavú innevitablemente, empero esas vueltas de tuercas, el tratamiento del guión y sobre todo el buen quehacer del reparto hacen que El Cisne Negro sea una solvente propuesta cinematográfica.

    Finalmente a mi en lo particular cre que El Luchador, Requiem por un Sueño y esta Cisne Negro son las mejores cintas del director, saludos y por cierto he revisado su blog y me parece genial por lo que he puesto el enlace en El Rincon de Harrison, saludos.

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