lunes, 5 de septiembre de 2011

CINE DE CULTO: LOS GOONIES

TÍTULO ORIGINAL: The Goonies
AÑO: 1985
DURACIÓN: 111 min.
PAÍS: Estados Unidos
DIRECTOR: Richard Donner
GUIÓN: Chris Columbus (Historia: Steven Spielberg)
MÚSICA: Dave Grusin
FOTOGRAFÍA: Nick McLean
REPARTO: Corey Feldman, Sean Astin, Josh Brolin, Martha Plimpton, Joe Pantoliano, Jeff Cohen, Kerri Green, Jonathan Ke Quan, Anne Ramsey, John Matuszak, Robert Davi, Lupe Ontiveros
PRODUCTORA: Amblin Entertainment / Warner Bros. Pictures
GÉNERO: Aventuras.

¡Los Goonies nunca se rinden!
-Mikey (Sean Astin)



Si existe una cinta que recuerdo con gran cariño esa es la de Los Goonies que al igual que La Historia Sin Fin (Wolfwang Petersen, 1984) marcaron mi niñez gracias a que en sus relatos se encuentran protagonistas pequeños, los cuales a través de fábulas asombrosas y grandes aventuras soslayan sus carencias emocionales al tiempo que luchan por adaptarse a esa nueva etapa en donde dejan de ser niños para convertirse en adolescentes y descubrir que los sueños de su infancia de desquebrajan inevitablemente al entrar en dicha fase formativa.

Motivo por el cual la cinta que firma el siempre solvente Richard Donner (La Profecía, 1976 y Superman, 1978) logra extraer de manera acertada dichos aspectos discursivos de un guión que firma el casi siempre pueril Chris Columbus (del cual solo me han gustado las cintas de Mi Pobre Angelito y Nueve Meses, esta última no me pregunten por qué) quien adapta la idea de otro sujeto que también cuenta con el síntoma de Peter Pan, el señor Steven Spielberg (que además funge como productor) para entregarnos una cinta entretenida, por momentos entrañable y otros tanto muy anacrónica (si la contextualizamos en esta época), sin embargo y lejos de equivocarme creo que la mayor virtud del film (además de contar con una sólida dirección por supuesto) es la de mostrarse honesta, motivo por el cual este se vuelve una irrepetible cápsula del tiempo que solo pertenecerá a esos añejos y añorables años ochentas.

La cinta nos narra las aventuras de un grupo de niños marginados por chicos más grandes de una ciudad costera que se han autodenominado Los Goonies,  una especie de clan en donde conviven diariamente viviendo grandes aventuras, ahí conocemos a nuestro protagonista, Mikey (Sean Astin) el cual admira a su padre quien le cuenta infinidad de historias de las cuales sobresale la de un famoso pirata conocido como el “Tuerto Willy” del cual cuenta la leyenda escondió su tesoro en las cercanías del pueblo y por supuesto jamás fue encontrado. El hecho es que Mikey se encuentra angustiado por que su padre (Keith Walker) no podrá pagar la hipoteca de su casa por lo cual este y su hermano mayor Brand (Josh Brolin) junto con su madre (Mary Ellen Trainor) tendrán que abandonar su casa (como la mayoría de los vecinos) para que un corporativo construya un campo de golf.

Sin embargo Mikey quiere aprovechar su último día en su hogar por lo que se junta con los otros miembros de su equipo para aprovechar los últimos momentos que les quedan juntos, ahí conocemos a Chunk (Jeff Cohen) el chico obeso que solo piensa en comer, Bocón (Corey Feldman) el chico que es el más renegado de todos y le gusta meterse en problemas, y por último Quan (Jonathan  Ke Quan) el chico oriental aficionado a los filmes de James Bond el cual se la pasa inventando algunos gadgets con el objetivo de emular a su héroe.

Total que por azares de la vida los chicos encuentran un viejo mapa que el padre de Mikey tiene guardado en su ático, coincidiendo extraordinariamente con la ubicación del tesoro del Tuerto Willy, por tal motivo Mikey se emociona y le pide a sus demás compañeros que emprendan la búsqueda del tesoro como la última aventura que vivirán juntos. Es así como estos chicos van en busca del dichoso hallazgo, sin embargo la aventura no resultará tan sencilla como pensaban pues estos se cruzarán con la familia Fratelli, un grupo de delincuentes que acaban de escapar de la cárcel y que son buscados por la policía, los cuales están comandados por la siniestra madre (Anne Ramsey) y el par de inútiles pero no menos peligrosos Francis (Joe Pantoliano) y Jake (Robert Davi), quienes de manera fortuita descubrirán los planes de Los Goonies por lo que también querrán apoderarse del misterioso tesoro.

Como podrá leer el distinguido el guión es ciertamente arquetípico y refleja de muchas formas el entorno social y cultural de su epoca en donde aspectos como los de fomentar la unión familiar y los buenos valores,  eran primordiales para la administración del Presidente Ronald Reagan quien creía que la familia era fundamental para hacer de Estados Unidos una nación poderosa, por tal motivo la dupla Spielberg-Columbus se percibe como pez en el agua al firmar dicho trabajo, motivo por el cual encontraremos personajes  y situaciones bastante tópicas, sin embargo el buen quehacer del director Richard Donner convierte al film en una disfrutable cinta de aventuras con múltiples referencias pop a la época; como los guiños a los slashers ochenteros representados en la figura de Perezoso (el hermano Fratelli deforme y de buen corazón) asi como algunos encuadres y puesta en escena, o a los ídolos musicales del momento como Michael Jackson (del cual se sueltan algunos chistes bastante jocosos) e incluso la referencia al Superman del propio Donner se percibe bastante efectiva.

Pero dejando de lado estos aspectos meramente anecdóticos hay que decir que el film de Donner cumple en los terrenos propiamente cinematográficos ya que aunque la historia es bastante simple en su desarrollo (personajes que enfrentan un conflicto), es la vigorosa dirección del director norteamericano lo que hace que el film mantenga una narrativa bastante fluida, de ahí que incluso esta borda varios géneros como el del terror o el de aventura propiamente hablando (por momentos el film recuerda a Indiana Jones en ciertas escenas) sin percibirse forzado. Por otra parte la imagineria visual resulta en demasía atractiva motivo por el cual el respetable logra mimetizarse con la historia que se nos esta contando; es por esto que es inevitable no hacerse participe de las aventuras de esta banda de chicos relegados por la sociedad quienes a través de este magnifico acontecimiento reencontraran los anhelos y sueños perdidos, como explorará de forma similar Rob Reiner en su cinta Stand by Me (1986). Por tal motivo resulta encomiable descubrir que la búsqueda del tesoro es una simple excusa para disertar en las motivaciones de los protagonistas.

Por otra parte hay que mencionar que la labor interpretativa de los chicos encaja a la perfección en la historia, aunque por momentos el personaje del gordo Chunk se percibe algo irritable y estúpido (¿Por qué siempre los gordos tienen que ser estúpidos en el cine?), empero su servidor piensa que es más por el diseño del personaje que por el performance del chico (esperen, creo que son ambos aspectos, jajaja). Bueno ya dejando al pobre de Chunk en paz, debo decir que el resto del reparto cumple sus papeles; por ejemplo Sean Astin logra darle ese toque de inocencia y esperanza a su Mikey, Josh Brolin hace el típico hermano mayor responsable y el buen Corey Feldman, pues es él mismo por lo que esta mas que bien (jajaja).

Obviamente no puede faltar el interés amoroso en esta historia, por lo que Kerri Grenn quedaba como anillo al dedo para cumplir el arquetipo de hermosa porrista pelirroja (que al final se quedará con el personaje de Josh Brolin cuando ve en este su verdadera naturaleza) la cual participa en otra de las cintas que disfrute en mi infancia llamada Lucas (David Seltzer, 1986) donde curiosamente también hace de porrista que se enamora (jajaja) de un joven Charlie Sheen (el jugador estrella de la escuela) y rechaza al cerebrito pero nada agraciado Lucas que como dato curioso interpreta el otro famoso Corey (el Haim) amigo del Corey (Feldman), los cuales trabajarían juntos posteriormente en la simpática Sin Permiso para Conducir (Greg Beeman, 1988) otra de mis favoritas. Creo que ahora si me siento algo viejo (jajaja).

Por supuesto los villanos son torpes y enclenques (aunque por momentos logran intimidar, sobre todo la mamá Fratelli), sin embargo el buen quehacer de Pantoliano (quien ya usaba bisoñe por ese tiempo, jajaja) y Davi le ponen cierta legitimidad al asunto. Bueno, ya para finalizar y no desviarme del tema debo decir que Los Goonies es un film disfrutable, bien rodado, con una banda sonora algo genérica (pero funcional) y actores con carisma que en su momento apuntaban para ser estrellas (solo Brolin y Feldman en menor medida lo lograron) que hacen del film un producto agradable y entretenido que sin lugar a dudas se ha ganado su estatus de culto.

2 comentarios:

  1. Hey, felicitationes por el blog, he leido ya varias reseñas de películas de mi agrado y de otras que me llaman la atención y checaré. Quiero recomendarte una película coreana, se llama Bloody Reunion, te anexo el trailer, solo lo encontré sin subtitulos
    http://www.youtube.com/watch?v=68r9N1VoWJU

    Saludos!!!

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  2. Genaro primeramente gracias por tomarte el tiempo de expresar tus opiniones y segundo gracias por tu preferencia en visitar el blog. Gracias por la recomendación y trataré de ver la cinta que me recomiendas (me agrada el cine de terror oriental). Saludos y estamos en contacto.

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