martes, 26 de junio de 2012

EL GATO CON BOTAS de Chris Miller

TÍTULO ORIGINAL: Puss in Boots
AÑO: 2011
DURACIÓN: 90 min.
PAÍS: Estados Unidos
DIRECTOR: Chris Miller
GUIÓN: Brian Lynch, David H. Steinberg, Tom Wheeler, Jon Zack
FOTOGRAFÍA: Animación
MUSICA: Henry Jackman
REPARTO: Antonio Banderas, Salma Hayek, Zach Galifianakis, Billy Bob Thorton, Constance Marie, Guillermo del Toro.
PRODUCTORA: Dream Works Pictures
PREMIOS: 2011: Nominada a mejor película de animación
GÉNERO: Comedia. Animación.




Ciertamente su servidor disfruto aquella picante cinta protagonizada por ese ogro verde, regordete y antipático llamado Shrek (Andrew Adamson, Vicky Jonson, 2001) cinta en la que se hallaban claras referencias a ese universo edulcorado que la Disney había instaurado en las conciencias de varias generaciones con el incansable séquito de princesitas desde aquella clásica Blanca Nieves y los siete Enanos de 1937; pero aquí a través de un discurso lleno de humor negro y sardónico se desmitificaban varios relatos medievales como caperucita roja, la bella durmiente y un largo etc. que la casa del ratón Miguelito se encargo de mitificar (¿qué paradoja?) con su particular visión. El hecho es que la jugada salio perfectamente bien para los realizadores del regordete personaje verdoso y obviamente una secuela se puso en marcha tres años después con Shrek 2 (Andrew Adamson, 2004), ahora con más presupuesto y más dosis de sarcasmo bien manejado por lo cual esta  logro superar a su predecesora en fondo y forma al tiempo que insertaba un nuevo personaje, el gato con botas (voz de Antonio Banderas) quien se posiciono rápidamente en el gusto del público por su particular diseño psicológico (un gato cachondo con aires de Don Juan) y los jocosos gags en los cuales intervenía.

Por tal motivo un spin off de este personaje era casi obligado por el carisma que destilo el mismo en las subsiguientes secuelas (la tercera y la cuarta verdaderos bodrios faltos de ingenio para un servidor), y es asi como llegamos a esta interesante e inteligente El Gato con Botas, film que tiene como mayor aliciente el desprender al peludo amiguito del universo de Shrek y sustentar su existencia en la propia mitología del mismo, por lo cual la historia comienza contándonos como nuestro protagónico felino (Banderas) se encuentra como un forajido perseguido por las autoridades gracias a que fue culpado de un crimen que no cometió, motivo por lo cual busca dar un gran golpe y poder limpiar su nombre; es así como llega a un pueblo y dentro de la cantina del lugar se entera que unos delincuentes llamados Jack (Billy Bon Trotón) y Jill (Amy Sedaris) estan próximos a llegar y estos tienen en su poder los famosos “frijoles mágicos” los cuales durante mucho tiempo han sido un mito para la mayoria, pero supuestamente estos llevan al castillo del gigante donde habita la famosa gallina de los huevos de oro, por lo cual aquel que tenga en su poder dichos frijoles podría obtener infinidad de riquezas.

Es asi como el gato con botas decide emprender el atraco al par de delincuentes pero la jugada sale mal cuando entra en escena Kitty “patitas suaves” (Salma Hayek), una gatita que aparentemente también planeaba robar los frijoles. El hecho es que toda esta operación fue  solo un embuste de  Humpty Dumpty (Zach Galifianakis) para volverse a encontrar con gato (Banderas) para convencerlo de robar los frijoles, ya que años atrás estos fueron amigos de aventuras pero un desafortunado evento los enemisto y se separararon por lo cual el felino juro jamás volver a ayudar al huevo, sin embargo cuando el ovalado nuestro peludo protagonista acepta a regañadientes ayudar de nuevo a Humpty, pero solo para limpiar su nombre en San Ricardo (lugar de donde se auto exilio); y es asi como este trío disfuncional emprenden un viaje lleno de aventuras, peligros, un poco de romance y por supuesto de redención.

Y es asi como Chris Miller (director de la descafeinada Shrek 3) logra descifrar y transportar a  la pantalla un guión (¡escrito por cuatro sujetos!) lleno de inteligentes diálogos, gags destornillantes, mesuradas dosis de mala leche y lo más importante, un compendio de personajes bien trazados a nivel psicológico; lo que provoca esa empatía en el espectador hacia dichos protagonistas por lo cual al respetable le importa lo que pasa con estos. Incluso uno de los aciertos más notables del argumento es descubrir ese pasado ominoso del cual esta dotado el personaje del gato (Banderas), muy al estilo de los personajes que interpretaba el siempre lacónico Clint Eastwood, pues en un inicio no sabemos a ciencia cierta sobre el pasado de este y el por que es perseguido como un delincuente hasta que se nos devela el mismo en uno de los pasajes más interesentes del film (el cual dejar ver la relación entre gato y Humpty).

Es por este motivo que ese aire de spaghetti western clásico con el que cuenta la historia como son esos entornos desérticos, personajes con moral ambigua como Kitty (Hayek) y el propio Humpty Dumpty (Galifianakis) dotan de credibilidad a una historia que si bien sustenta su tesis en un universo fantástico se perciben bien resueltos; de ahí que los diferentes cambios de intención del guión como el pasado oscuro de gato o el viaje al castillo del gigante de las habichuelas mágicas, e incluso el enfrentamiento final con la gansa de los huevos de oro encajan a la perfección por lo cual el film se percibe bien cohesionado y no da la impresión de que la cinta es solo es una sucesión de gags sin una narrativa.  Asi mismo y volviendo a las motivaciones de los personajes, estas se revelan honestas por lo cual los mismos se vuelven entrañables, si no basta con descubrir el verdadero mcguffin del filme.

Ahora bien las interpretaciones vocales de los actores estan simplemente geniales, sin embargo me gustaría resaltar la labor de Antonio Banderas como nuestro peludo héroe pues esa socarronería y desfachatez que le imprime el actor español lo vuelve tan deliciosamente entrañable, por lo cual sin lugar a dudas el gato con botas es el inminente protagonista del filme. Empero los personajes de apoyo como el complejo Humpty Dumpty  que resuelve exquisitamente Zach Galifianakis aportando esa demencia que tanto caracteriza a los personajes que suele interpretar, se convierte en punto nodal de la historia y es indudablemente pieza fundamental para que la cinta funcione, como también lo es el personaje de Kitty “patitas suaves”, pues este aunque está diseñado como una femme fatale  (también con un pasado oscuro), logra despojarse de parecer un simple arquetipo al tiempo que Salma Hayek logra dotarla de personalidad gracias a esa cadencia y arrojo que le imprime la actriz mexicana. ¡Ah! casi olvido a Billy Bob Torthon y a Contance Marie como Jake y Jill respectivamente, y es que sus performance son más que correctos pues el diseño de sus personajes son  tan planos que sus villanos son bastante tópicos e incluso me atrevería a decir que son el punto más flojo del filme.

En lo referente a la dirección cabe mencionar que Chris Miller logra resolver bastante bien el ritmo de un filme que combina por partes iguales momentos de introspección  y estimulantes secuencias de acción (para un servidor la batalla de baile entre gato y Kitty de lo más divertido del film, jajaja) por lo cual el visionado del mismo se pasa como un suspiro. Asi mismo no me gustaría pasar por alto la importancia que tiene en la obra la divertida y heroica banda sonora de Henry Jackman, pues sin esta la historia no tomaría la relevancia obtenida, y por supuesto el apartado visual logra transmitir ese universo mágico en el que se desarrollan los eventos.

Ya para finalizar diré que recomiendo  El Gato con Botas como un sólido entretenimiento  el cual esta por encima de las decepcionantes Shrek Tercero (Miller, 2007) y Shrek Para Siempre (Mike Mitchell, 2010), al tiempo que se descubre como una bocana de aire fresco para la franquicia que el propio ogro verde instauro hace 10 años.


martes, 19 de junio de 2012

WALLACE Y GROMIT, LA GUERRA DE LOS VEGETALES de Nick Park y Steve Box

TÍTULO ORIGINAL: Wallace & Gromit: The Curse of Were-Rabbit
AÑO: 2005
DURACIÓN: 85 min.
PAÍS: Reino Unido
DIRECTOR: Nick Park, Steve Box
GUIÓN: Nick Park, Steve Box, Bob Baker, Mark Burton
FOTOGRAFÍA: Dave Alex Riddett & Tristan Oliver
MUSICA: Julian Nott
REPARTO: Peter Sallis, Ralph Fiennes, Helena Bonham Carter, Peter Kay, Nicholas Smith, Liz Smith, John Thomson,
PRODUCTORA: DreamWorks Pictures / Aardman Animations
PREMIOS: 2005: Mejor película animada
GÉNERO: Comedia. Animación.


Todavía recuerdo con gran agrado aquella estimulante e inteligente cinta llamada Pollitos en Fuga (2000), largometraje que represento una bocana de aire fresco en una industria saturada por productos de la Pixar que desencadeno la ya conocida Toy Story de John Lasseter  allá por el año 1995, y es que a diferencia de los productos de la Disney y su filial la cinta de Nick Park contaba en su guión con un discurso maduro despojado de grandilocuencias sobre la amistad, la solidaridad y demás aspectos humanos vertidos en aquellos amigables personajes, al tiempo que dichas disertaciones se percibían accesibles tanto para chicos como para grandes, sin embargo creo que uno de los aspectos más sobresalientes (además del tratamiento del guión por supuesto) fue presenciar esa deliciosa y compleja técnica llamada claymation (animación hecha con arcilla) lo que transmitía esa magia al espectador, pues ésta dota de esa tangibilidad a los personajes que la animación por ordenador no puede lograr la mayoría de las veces. Y por supuesto las innumerables referencias cinematográficas que se descubrían en la cinta hacían de Pollitos en fuga una película redonda.

Pues bueno creo que fue el éxito de esta cinta lo que animo a los Estudios Ardman y al propio Nick Park para proporcionarles el voto de confianza para por fin lanzar a la pantalla grande a esos sagaces, irónicos, irreverentes y por supuesto divertidos personajes llamados Wallace y Gromit quienes aparecieron por primera vez el año de 1989 hasta el 2002 en varios cortometrajes (dignos de varias nominaciones al Oscar), los cuales reflejaban a través de su mirada mordaz e historias llenas imaginación el contexto sociocultural londinense. Pues bueno La Guerra de los Vegetales nos cuenta la siguiente historia, el par de colegas Wallace (voz de Peter Sallis) y Gromit son los encargados de administrar un negocio de control de plagas en una pequeña ciudad donde estos se encuentran llenos de trabajo con la creciente plaga de conejos que comienzan a convertirse en el dolor de cabeza para los habitantes de la comunidad, quienes se hallan preocupados por sus cosechas las cuales cuidan celosamente durante todo el año para poder participar en el concurso anual de vegetales;  reunión que funge como la única motivación que tiene la entidad para exaltar sus necesidades de existencia (o como sucede en Aguascalientes con su Feria Nacional de San Marcos, donde un gran porcentaje de sus habitantes se abstraen cada año de su cotidiano en un ejercicio de evasión donde la doble moral y excesos mundanos son el pan de cada día durante veinte largos días, o sea todo una oda de surrealidad que incluso ni el propio Fellini sería capaz de digerir en algún nuevo proyecto si todavía viviese).

Bueno pero retomando la trama resulta que el siempre bonachón Wallace (Sallis) decide acabar de una vez por todas con la plaga de roedores cuando acude al llamado de auxilio  de Lady Tottington (voz de Helena Bonham Carter), mujer pudiente de buen corazón que cuenta en su mansión con una voraz plaga de animalitos pachoncitos (conejos) a los cuales el par de colegas capturan con una “maquina succionadora de roedores” a los que pretenden rehabilitar para no sacrificarlos, sin embargo y como sucede en la mayoria de las ocasiones, las buenas intenciones de Wallece no siempre llegan a buen puerto en la práctica, motivo por lo cual al realizar un experimento donde este conecta su cerebro al de un conejo algo pasa que las conciencias de ambos parecen fusionarse. El hecho es que después de este suceso, esa misma noche ocurre otro ataque pero ahora con más brutalidad que los anteriores pues al parecer ahora el responsable es un gigantesco monstruo, un enorme conejo come vegetales. Motivo por lo cual el par de héroes deberá investigar y resolver el origen de dicha abominación antes de que este ataque en el festival de los vegetales estropeando la tradición de la familia Tottington, claro que esto no será nada fácil pues nuestro despistado Wallace (Sallis) tendrá que lidiar con otro problema, con un antipático sujeto llamado Víctor del Bosque (Ralph Fiennes) el cual cree que nuestro protagonista trata de apoderarse de la fortuna de la dama en cuestion (verdadero leitmotiv de este) por lo cual hará hasta lo imposible por sacarlo de la jugada.

Como el respetable podrá leer, el guión de esta exquisita cinta esta desarrollado de tal manera que es imposible no rendirse ante tanta imaginación y referencias cinematográficas, las cuales se perciben en demasía honestas; y es que estas van desde el King Kong  de Merian C. Cooper (1933), pasando por El Hombre Lobo (George Waggner, 1941) con la cual hay una clara vinculación narrativa, e incluso su servidor encontró algún guiño con aquella Los Cazafantasmas  de Ivan Reitman de 1984 (la manera de operar de nuestros protagonistas al cazar y almacenar a los roedores recuerda en demasía a Bill Murray y compañía). Sin embargo dejando de lado estos gestos cinematográficos que insertan de manera inteligente los guionistas, es de nuevo el diseño y desarrollo de personajes lo que hace de este film un relato entrañable.

Y es que uno de los méritos del film de Nick Park y Steve Box es que los personajes se salvan de ser simples arquetipos gracias a que sus motivaciones estan bien trazadas pues estas dotan de legitimidad a los mismos, por ejemplo el dúo protagónico cuenta con esos finos rasgos de pareja dispareja que tantas cintas han mostrado con mayor o menor eficacia en infinidad de buddy movies, pues bueno en este caso  mientras por una parte Wallace (al cual el veterano actor Peter Sallis dota de ese aire sureño) es el tipo de buen corazón con buenas intenciones, creativo y algo despistado al tiempo que funge como el líder, es su compañero el perro labrador Gromit quien equilibra la situación con varias dosis de creatividad e inteligencia sacando por momentos de apuros a su amo, por lo cual este se despoja de ser un escueto sidekick y se convierte en un personaje con bastante relevancia, al tiempo que resulta suficientemente interesante en su  encarnación pues sin decir una sola palabra son sus no verbales los que logran transmitir infinidad de emociones.

Por otra parte el villano de la función que se encuentra deliciosamente interpretado por Ralph Fiennes resulta la antitesis perfecta para nuestro dúo (incluso también cuenta con su malévolo perro ayudante, jajaja) y representa de manera fehaciente (por supuesto bastante exagerado para ahondar en esta sátira) ese verdadero lado oscuro del ser humano expresado en la avaricia, animadversión y demás perversidades, las cuales por supuesto estan simbolizadas de forma muy velada para que los más pequeños puedan disfrutar de una historia que por supuesto respeta el intelecto del espectador tanto infantil como adulto (otra de sus virtudes por supuesto). Asi mismo Helena Bonham Carter como Lady Tottington resuelve con soltura un personaje bastante excéntrico y divertido (como los que hace en las producciones de su esposo el señor Burton), y por último ese compendio de fantásticos personajes secundarios que interactúan con los protagónicos como el cura del pueblo, el gendarme o los diversos granjeros que solo estan preocupados por el dichoso festival de legumbres, se vuelven fundamentales en el relato y desarrollo de la historia por lo cual lo enriquecen de sobremanera.

Por supuesto el apartado visual es sin lugar a dudas el punto álgido de la cinta pues este cuenta con una cuidadísima puesta en escena que recrea aquel aire ingles de las comunidades sureñas del país europeo por lo cual cada maqueta, escenario y representación arquitectónica constituye todo un reto para la recreación de dichos elementos, esto sin contar que las técnicas de animación estan sustentadas en ese difícil arte llamado stop motion (aunque también se utiliza la animación por computadora pero esta es casi imperceptible) el cual le da ese sabor que las nuevas técnicas de animación por ordenador 100 % no logran. Asi mismo la recreación de las atmósferas y la implementación de una soberbia fotografía son dignas de cualquier superproducción hollywoodense, si no basta con presenciar la genial la escena donde el cura del pueblo es atacado por el Conejo Lobo, pues ésta implementa varias tomas con mirada subjetiva que recuerdan a los mejores filmes de horror como aquel Drácula de Coppola (1992) o el tercer acto donde hasta el maestro Hitchcock es homenajeado en aquella secuencia de acción en donde Gromit pilotea un avión, pues dicha sucesión de tomas cuenta con la suficiente carga de suspense y emoción que solo el director inglés podía inyectarle a sus historias .

Por otra parte la musica es genial y refuerza cada momento dramático, emotivo o divertido que sucede frente a la pantalla por lo cual este aspecto también se vuelve fundamental en la obra. Ya para finalizar debo decir que la cinta del tándem Park-Box se descubre como una obra cinematográfica redonda, la cual contiene en su discurso una crítica mordaz al consumismo y a los procesos de disociación del sujeto contemporáneo, alocución que toma mayor relevancia al no presentarse obvia ni gratuita, por lo cual se explora de manera inteligente ese lado oscuro del ser humano (la perversión del mismo como sucediera en El Hombre Lobo); y lo mejor es que se hace un manejo del humor bastante fino con algunas dosis de slapstick que hará las delicias de los pequeños, sin dejar que el público adulto goce de esa comedia satírica y mordaz que solo los ingleses pueden realizar.

Asi que estimado lector si usted aun no ha visto Wallace y Gromit: La Guerra de los vegetales no lo piense más y déjese llevar por esta magnifica obra que no lo decepcionara se los aseguro. Para finalizar dedico esta entrada a mi pequeña y hermosa hija la cual es acérrima seguidora de este par por lo cual hace que le ponga dicha cinta casi a diario (jajaja) y con la cual paso verdaderos momentos de diversión al visionar la misma.


sábado, 9 de junio de 2012

LA PIEL QUE HABITO de Pedro Almodóvar

TÍTULO ORIGINAL: La Piel Que Habito
AÑO: 2011
DURACIÓN: 117 min.
PAÍS: España
DIRECTOR: Pedro Almodóvar
GUIÓN: Pedro Almodóvar (Novela: Thierry Jonquet)
MUSICA: Alberto Iglesias
FOTOGRAFÍA: José Luis Alcaine
REPARTO: Antonio Banderas, Elena Anaya, Marisa Paredes, Jan Cornet, Blanca Suárez, Bárbara Lennie, Eduard Fernández, Roberto Álamo, José Luis Gómez, Fernando Cayo, Susi Sánchez
PRODUCTORA: El Deseo S.A.
GÉNERO: Thriller. Drama.

El ser humano es un ente en demasía complejo, un individuo que se ha distinguido de las otras razas por contar con particularidades muy propias como gozar de emociones (odio, amor, empatia, etc) y por supuesto por estar dotado de inteligencia; desgraciadamente en muchos de los casos este último aspecto (la razón) choca de manera fortuita con las emociones (o viceversa) provocando un caos existencial en el sujeto quien en aras de volver a encontrar ese equilibrio que le siga permitiendo coexistir en este plano terrenal puede llegar a desarrollar algún tipo de neurosis (dolor emocional excesivo), cuando no se halla dicha reconciliación. De ahí que el hombre cometa actos de gran perversidad o barbarie, desde un simple crimen pasional hasta la gestación de una guerra mundial (no es broma).

Pues bueno como los seguidores del director español sabrán la mayoria de su obra explora esos pathos del ser humano como son los desamores, infortunios y demás aspectos intrínsecos desde la perspectiva del universo femenino en la mayoría de los casos, claro siempre encontrando en diversos géneros como la tragicomedia, el melodrama e incluso el noir el vehículo para proyectar dichas inquietudes. De ahí que este último trabajo llamado La Piel que habito resulte una estimulante sorpresa para su servidor al descubrir que Almodóvar sale un poco de los terrenos que ya conoce para embarcarse en un género que no había explorado como es el del horror. Y es que cuando uno visiona La Piel que habito descubre una obra que por momentos recuerda cintas como Re-Animator (Stuart Gordon, 1985), El Gabinete del doctor Caligari (Robert Wiene, 1920), Frankenstein (James Wale, 1939), El Fantasma de la Opera (Rupert Julian, 1925) o incluso El Abominable Dr. Phibes (Robert Guest, 1971), por supuesto no en forma pero si en fondo, pues las motivaciones del Dr. Robert Ledgard (Antonio Banderas) son tan legítimas como las de cualquier mad doctor que nos haya regalado durante años cintas como las mencionadas anteriormente.


La historia es la siguiente, Robert Ledgard (Banderas) es un eminente cirujano plástico que ha dedicado años de investigación para la creación de nueva piel humana (transgénica) motivado en gran parte a un accidente que provoco que su mujer sufriera infinidad de quemaduras en toda su humanidad (cabe hacer mención que detrás del accidente se encuentra un secreto bastante oscuro) por lo cual se ha obsesionado en encontrar la formula perfecta para realizar dicho descubrimiento, claro que todos estos experimentos que realiza Ledgard en su laboratorio particular son ilícitos pues conllevan  cierta falta de ética sobre todo cuando tiene en contra de su voluntad a Vera (Elena Anaya), la mujer que ha sido su objeto del deseo para realizar dichos experimentos. Por supuesto Robert tiene como aliada a Marilia (Marisa Paredes) quien funge como una especie de madre  pues lo ha cuidado desde que era un crió y en esta etapa de su vida lo protege al resguardar sus secretos profesionales al tiempo que cuida que Vera no escape de su cautiverio.

Y desgraciadamente mis respetables lectores es todo lo que puede decir de la trama de este perverso e inteligente puzzle que Almodóvar teje con gran maestría, y es que si contará más sobre la trama seguramente les echaría a perder la sorpresa que nos tiene guardada el realizador manchego a través de un guión lleno de sorpresas y un contundente twist a la mitad del film que pone los pelos de punta. Y es que aunque como he mencionado anteriormente La Piel que habito encaja perfectamente en el género de horror, es su discurso sociopolítico lo que la vuelve tan perturbadora pues este ahonda en los procesos de despersonalización que sufre el individuo, no de manera inconsciente como sucede con las nuevas tecnologías como el facebook y demás redes sociales donde el sujeto se mimetiza a niveles cuasi enfermizos desarrollando realidades y/o personalidades alternas (creo que este fenómeno se presta para abordarlo en otro momento). Sin embargo aquí el realizador español nos plantea de manera más cruda e irrebatible dicho fenómeno de disociación basado un poco en las teorías del psicólogo neocelandés John Money, que dicho sea de paso nos recuerda a un Cronenberg en sus inicios y esa lucha constante de la mente con el cuerpo.

Por tal motivo el gran mérito de la cinta de Almodóvar es la seguridad con que este amarra un guión en demasía complejo, logrando incluso llevarlo de la perversión más insolente (la cirugía de Vicente interpretado de manera inconmensurable por Jan Cornet) hasta el paroxismo más extremo (esa vinculación entre Robert Ledgard y Vera es el punto más torcido de la trama) por lo cual aquellos aspectos narrativos que por momentos pudieran tornarse ridículos como cuando irrumpe en escena aquel extravagante personaje ataviado con un traje de tigre ¡¿?!, son resueltos con ingenio y perspicacia como solo Pedro Almodóvar sabe hacerlo. Por supuesto mucha de la credibilidad que la cinta adquiere se debe a las portentosas actuaciones del reparto, y es que si lo analizamos el personaje que interpreta Antonio Banderas se descubre en demasía complejo gracias a un compendio de pathos que lo mantienen dentro de un entorno real por lo cual hay que acotar que la actuación de este es encomiable (pasado ominoso y perturbador).

Por otra parte Elena Anaya como Vera logra dotar de ese aire inescudriñable y misterio a su personaje el cual encaja a la perfección con aquellas protagonistas femeninas de la filmografía del realizador español, por lo cual descubriremos sus verdaderas motivaciones solo hasta el último tercio del film, logrando a su vez que el suspense de mantenga desde el arranque de la misma hasta su conclusión. Empero quien quiza se lleva la cinta es sin lugar a dudas el joven actor Jan Cornet como Vicente, ya que este en verdad se “mete en la piel” de su atormentado personaje logrando que todas las piezas encajen a la perfección para que el relato funcione de manera loable. Finalmente Marisa Paredes (que desde el humilde punto de vista de un servidor esta un tanto desaprovechada) resuelve con soltura un personaje no muy complejo y redondea el casting de buenos actores.

Ahora en lo referente al apartado visual debo decir que la puesta en escena esta milimétricamente cuidada, la fotografía preciosista con tonos fríos y la composición de los planos nos denotan un film vanguardista (un poco más minimalista en comparación a otras obras del director), la música se percibe como otro personaje más y por supuesto me atrevería a decir que tal vez este filme sea el trabajo más cuidado visualmente por parte del director manchego, aunque desde Hable con Ella (2002) se notaban ciertas inquietudes estilísticas que remitían a una puesta en escena más sofisticada. Ya para finalizar diré que usted amigo lector no debe perderse por ningún motivo esta excelsa cinta la cual combina de manera eficaz amor, desencuentros, horror y hasta surrealismo, todo en dosis perfectas que hacen que este último trabajo del maestro Almodóvar se descubra como ese viaje perverso a los rincones mas oscuros del ser humano.



 

lunes, 4 de junio de 2012

MARVEL UNIVERSE: GHOST RIDER ESPIRITU DE VENGANZA

TÍTULO ORIGINAL: Ghost Rider: Spirit of Vengance
AÑO: 2012
DURACIÓN: 95 min.
PAÍS: Estados Unidos
DIRECTOR: Mark Neveldine, Brian Taylor
GUIÓN: Mark Neveldine, Brian Taylor (Historia: David S. Goyer)
MUSICA: David Sardy
FOTOGRAFÍA: Brandon Trost
REPARTO: Nicolas Cage, Idris Elba, Violante Placido, Fergus Riordan, Ciarán Hinds, Christopher Lambert, Johnny Whitworth
PRODUCTORA: Columbia Pictures / Hyde Park Entertainment / Imagenation Abu Dhabi FZ
GÉNERO: Fantástico.


"Normalmente me gustaría la idea de ver la cara de Nicolas Cage arder, pero, desgraciadamente, 'Ghost Rider: Spirit of Vengeance', no es un documental (...) Su Johnny Blaze parece menos torturado que torturador, con el público como víctima (...) Puntuación: * (sobre 4)" (Kyle Smith: New York Post)

"Tanto si Cage está pagando todavía sus castillos, apaciguando a Hacienda o reconstruyendo su colección de cómics, es evidente que ha decidido, por ahora, vender su talento al frío y duro metal (...) Puntuación: ** (sobre 5)" (Elizabeth Weitzman: New York Daily News

"Al final, resulta bastante más divertida, gamberra y desquiciada que la anterior" (Carmen L. Lobo: Diario La Razón)

"Una película sucia, incoherente, estrambótica, lo más cerca que va a estar nunca un gran estudio de rodar (en descampados de Rumanía) una serie Z directa a dvd" (Noel Ceballos: Fotogramas) "


Hay sujetos que encuentran en la masturbación una vía de escape por la incapacidad de poder relacionarse con alguna linda damita a nivel sexual o simplemente por que han encontrado en la palma de su mano un divertimento sano con el cual matar el tiempo, o en su defecto por sufrir alguna especie de neurosis (jajaja, creo que es lo primero en verdad), en el caso de un servidor debo decir que cuando se siente aburrido, abatido o simplemente estresado y/o fastidiado por las actividades del cotidiano (hacer que el puto dinero rinda la quincena o lidiar con gente estúpida la mayoría del tiempo en interminables y estériles charlas) ha encontrado en el oscuro y cutre trabajo de su amigo Nicolas Cage, y es que lo considero una especie de amigo por que la verdad ya no me encabronan sus pendejadas o malas decisiones al escoger tal o cual proyecto pues he encontrado en sus pueriles cintas y sobreactuados performances un placer culpable, jajaja.

Como sea, debo decir que cuando visione la primera entrega de  Ghost Rider (Mark Steven Johnson, 2007) de verdad no esperaba encontrarme con un The Dark Knight (Nolan, 2008) aunque siendo honestos el material del personaje filial de la editorial Marvel Knights pudo haber tenido un tratamiento más oscuro en comparación con el infantil resultado obtenido al final gracias a sus características, ¿pero que podíamos esperar? si el director es aquel sujeto que nos entrego ese truño  llamado Daredevil allá por el año 2003 con aquel inexpresivo Ben Affleck, pseudo actor que después de dicho trabajo daban ganas de sodomizarlo (aunque se ha ganado el respeto del publico como realizador a últimas fechas). Y segundo por que el Johnny Blaze cinematográfico estaba interpretado por el señor muecas Nic Cage, el cual usaba un bisoñe que causaba que el respetable pena ajena por lo cual este  ya no le guardaba un ápice de respeto.

Pero bueno eso ya es historia ¿no? más  sin embargo y sin que nadie lo pidiera (a excepción de Cage supongo, jajaja) cinco años después nos viene esta secuela con menos presupuesto a cargo de los ¿directores? Mark Neveldine y Brian Taylor, creadores de aquellas descerebradas y cuasi vulgares Crank, veneno en la sangre (2006) y Crank, alto voltaje (2009) divertidas guarradas que tenían como encanto no tomarse demasiado en serio y a un Jason Statham burlándose de si mismo, es por esto que las expectativas de su servidor con esta Ghost Rider 2 no eran demasiado altas, motivo por lo cual cuando visione esta secuela no pudo evitar entregarse a la complicidad de una casposa, bizarra y estúpida serie b, terreno en el cual el buen Nic Cage parece sentirse como pez en el agua.

Ok ¿pero de que va la historia? Pues resulta que Johnny Blaze (Cage) al tratar de controlar sus deseos de venganza emigra a Rumania para encontrar un poco de paz motivo por lo cual vive como un ermitaño en aquel país del viejo continente, sin embargo su tranquilidad será quebrantada cuando un moje con cierto gusto por las bebidas alcohólicas llamado Moreau (Idris Elba), (tal parece que para ser un monje rebelde de cualquier misión hay que tener como rasgos característicos el ser alcohólico, mal hablado y vestir de cuero, ¡ha! y saber manejar como todo un hombre armas de fuego, jajaja) encuentra a Blaze pues conoce su secreto sobre su alter ego Ghost Rider, esto con el único objetivo de que lo ayude a el y a Nadya (Violante Placido) a rescatar a su hijo Danny (Fergus Riordan), ya que una secta satánica lo ha secuestrado pues el viejo enemigo de Blaze, el demonio Roarke (Ciaran Hinds) necesita de un nuevo cuerpo para volver a renacer para por fin poner a la humanidad bajo el yugo del ¿anticristo?……o algo así la verdad es que el argumento es tan tópico y pueril que de verdad no importa, jajaja.

El hecho es que este escuálido planteamiento solo será un pretexto para que la dupla de directores se encargue de montar infinidad de descerebradas secuencias de acción (por cierto bastante bien montadas), infinidad de diálogos y chistes que rayan la jocosidad más pueril (la meada de fuego por parte del protagonico es impagable) y por supuesto para disfrutar de toda esa galería de exageradas expresiones faciales por parte de nuestro protagonista, amen de que ahora se agradece que el buen Nic no cuente con el vergonzoso tupe de la primera entrega y muestre su calvicie natural jajaja. Y es que uno de los alicientes de este film es descubrir al personaje de Ghost Rider (Cage) materializarse en el vengador a plena luz del día, por lo cual hay que decir que los efectos especiales se perciben mejor resueltos que en la primera cinta aun y con menos presupuesto (esas animaciones en blanco y negro logran capturar el espíritu del comic).

Asi mismo las secuencias donde intervienen vehículos de motor como autos y por supuesto la motocicleta del protagonista, se descubren bien hechas pues estan desarrolladas a la vieja escuela con implementación de Stunts y demás herramientas que permiten usar de manera más discreta efectos hechos por computadora por lo cual la acción se desarrolla de forma fluida sobre todo en aquel acto final el cual bien vale la pena. Sin embargo y como en toda serie b (jajajaja cada vez es más recurrente que grandes estudios hagan de manera conciente o inconciente este tipo de cintas), si quitamos los diálogos estúpidos y la acción desmedida pues nos quedan pasajes bastante flojos y hasta aburridos sobre todo cuando se pretende explorar en la psicología de los personajes ya que estos se sienten forzados y metidos con calzador, además de que Nicolas Cage pretende transmitir cierta carga emocional por su pasado ominoso a través de gestos que nos remiten más a una sensación de estreñimiento que de carga moral.

Empero su servidor encontró en el performance del señor Cage y esos diálogos ridículos que ni el mismo se cree (jajaja) el ingrediente perfecto para darle ese toque exótico al exagerado espectáculo que estaba presenciando, al tiempo que agradeció volver a ver frente a pantallas al siempre impávido Christopher Lambert ex Highlander como líder extremista religioso (ahora calvo y tatuado por cierto, jajaja). Ahora bien el villano de la función Roarke (Hinds) se percibe bastante genérico y no logra llegar a esos niveles de maldad que ameritaba el relato, pero bueno tampoco Peter Fonda como Mephistopheles daba el ancho, pues el hecho es que en aquella primera entrega como en esta solo se aprovecha la presencia de actores destacados para dotar de cierta presencia a dichos personajes, y por supuesto tanto los secundarios como Moreau (Idis), Nadya (Placido) y Danny (Riordan) la verdad pasan algo desapercibidos, aunque hay que aclarar que por lo menos el primero logra hacer por momentos una aceptable dupla con Cage, aunque aceptémoslo a final de cuentas el film es un vehículo de lucimiento para nuestro Ángel Enamorado sea el rey de la función.

Por otra parte el tándem de directores Neveldine/Taylor logran hacer lo que parecía imposible, lograr una narrativa más acorde al lenguaje cinematográfico pues si recordamos estos realizadores estan acostumbrados desarrollar sus proyectos como si de un videojuego se tratase, motivo por lo cual esta cinta resulta más satisfactoria a nivel narrativo y  por supuesto visualmente en comparación a la primera Ghost Rider. Asi que ¿qué más puedo decir de esta cinta? Pues que me ha divertido de sobre manera y aunque se que es una puñeta mental no puedo quitarle ese merito de ser un producto sin mayores pretensiones que las de entretener, aspecto que cintas con presupuestos desmedidos como los que manejan tipos como los Michael Bay, los Tony Scott o los Stephen Sommers no logran en el respetable.

Y con esto no quiero decir que los directores Mark Neveldine y Brian Taylor sean mejores o peores que los mencionados arriba, sin embargo su servidor agradece que por lo menos estos sujetos reconozcan sus limitaciones formales y hagan productos divertidos (¡¿para cuando Crank 3?¡ jajaja),  que eso sí a muchos les parecerán simple y llana mierda, pero por lo menos estos no se regodean en su ineptitud cual Uwe Boll quien cree que esta revolucionando el mundo del celuloide, (jajaja). Bueno ya para finalizar diré que recomiendo Ghost Rider, Espíritu de Venganza para verla una tarde en domingo si usted estimado lector no tiene muchas ocupaciones o simplemente si quiere ver como se quema la cara de Nicolas Cage cuando se transforma en una calavera envuelta en fuego, creadme cuando les digo que esto no tiene precio, jajaja.