lunes, 20 de mayo de 2013

IRON MAN THREE de Shane Black

Título original: Iron Man 3
Año: 2013
Duración: 130 min.
País: Estados Unidos
Director: Shane Black
Guión: Shane Black, Drew Pearce (Personajes: Stan Lee)
Música: Brian Tyler
Fotografía: John Toll
Reparto: Robert Downey Jr., Ben Kingsley, Gwyneth Paltrow, Don Cheadle, Guy Pearce, Rebecca Hall, James Badge Dale, Stephanie Szostak, Ty Simpkins, Wang Xueqi, Jon Favreau, William Sadler, Bingbing Fan, Yvonne Zima, Dale Dickey, Ashley Hamilton, Stan Lee
Productora: Marvel Studios / Walt Disney Pictures
Género: Fantástico. Ciencia ficción. Acción


Como siempre he pensado vivir la experiencia de apreciación cinematográfica (o en palabras más simples y llanas, ir al cine) debería ser un proceso consciente en el cual los sentidos del sujeto que se encuentra frente a pantalla estén alertas para asimilar lo que entra por sus ojos y queda alojado directamente en lo más recóndito de su cerebro (aunque a veces lo dañe para siempre cuando se vislumbre algún truño infumable, no es broma), ya sea que se aprecie una obra de David Lynch, Cronenberg, Santiago Segura, Ang Lee, Allen, etc. el hecho es que uno siempre escoge que ver por bagaje, por pasar el rato, por divertimento e infinidad de motivos que nos incitan a entrar a una sala de cine.

Bueno, y si a eso aunamos una buena compañía a la hora de revisar el material seleccionado pues la experiencia se vuelve más gratificante, como fue el caso de un servidor al ver esta tercera entrega del Hombre de Hierro, cinta que repunta el vuelo considerablemente después de la irregular Iron Man 2 (Favreau, 2010) y se acerca más a los orígenes de la original (incluso el que esto escribe podría ponerla al mismo nivel de la primera). Y es que uno de las principales virtudes de esta nueva entrega es el cambio de director, pues aunque John Favreau (quien aquí también tiene una breve participación frente a cámaras) es un buen realizador, es de suponer que tuvo que ceder a los caprichos de la productora para armar un espectáculo visual más monumental en la mencionada secuela aunque esto supusiera descuidar el argumento. 

El hecho es que la llegada de Shane Black refresca de buena manera a la franquicia con un humor más guarro (a lo Arma Mortal con respecto a la interacción entre Stark y Rhodes, cosa que no es casualidad si tomamos en cuenta que Black es el escritor de las cintas protagonizadas por Mel Gibson y Danny Glover), consistentes escenas de acción repletas de efectos visuales, y lo más importante, que el guión vuelve a centrarse en la psique de nuestro carismático protagonista, quien ahora enfrenta a un villano que de verdad lo mete en problemas (aspecto que no sucedía en las primeras cintas). La historia retoma los sucesos que acontecen en Los Vengadores (Whedon, 2012), ahora Tony Stark (Downey Jr.) es toda una celebridad (como si no lo fuera ya) pues básicamente fue el responsable de cerrar el agujero intergaláctico que estaba a punto de destruir la ciudad de Nueva York. 

Sin embargo dicho acontecimiento también ha dejado estragos emocionales en Tony (Downey Jr.) lo que ha provocado que este desarrolle cierta paranoia y  trabaje en exceso, lo que le ha traído problemas en su relación amorosa con Pepper  (Gwyneth Paltrow); por si esto no fuera poco aparece en el panorama mundial un villano llamado El Mandarín (Ben Kingsley) que comienza a poner de cabeza a la administración del presidente de los Estados Unidos (William Sadler) al desatar una ola de acciones terroristas a través de oriente para que el gobierno del presidente Ellis (Sadler) ceda ante sus peticiones. Por supuesto Iron Man podría poner fin al conflicto pero el gobierno no quiere meter a un superhéroe en un problema político, por lo cual el Coronel James Rhodes (Cheadle) ahora como Iron Patriot (nombre que desprende uno de los mejores chistes de la cinta a cargo de Joan Rivers) es el encargado de buscar al Mandarin para poner fin al conflicto. 

Empero no todo es lo que parece puesto que el caos llega realmente a la vida de Tony con la sospechosa aparición en escena de  Aldrich Killian (Guy Pearce) ahora un científico adinerado que hace 20 años pidió la ayuda financiera de este para solventar un ambicioso proyecto llamado “extremis” el cual se basaba en regenerar genéticamente las  células de seres vivos pero dicho proyecto era bastante inestable, sin embargo nuestro egocentrista protagonista desecho el mismo por considerarlo peligroso. Ahora Tony Stark enfrentará uno de los mayores peligros en su existencia  y tendrá que valerse de todo su ingenio e inteligencia (y por supuesto la ayuda del incondicional Jarvis) si quiere que recuperar su vida y a los que ama.

Como hacía mención al inicio de este análisis una de las virtudes de Iron Man Three es la visión relajada (que no simplona) de la cual dota Black al filme, y es que aunque ahora la trama se torna más oscura en relación a las consecuencias y responsabilidades del significado de la heroicidad (basado ligeramente en la serie Extremis), el realizador junto al guionista Drew Pearce realizan una exploración honesta y digerible de este aspecto con el personaje  principal, tesis que el mismo Stark sentencia al final de la cinta y en donde indica que no importa que destruyan sus juguetes y sus trajes, pues el siempre será Iron Man mientras sus acciones así lo demuestren. De ahí que el film realmente explora en los miedos, motivaciones y virtudes de Tony Stark (Downey Jr.), por lo cual este se torna aún más rico en su diseño psicológico, de ahí que no sea casualidad que gran parte del metraje Downey Jr. luzca  sin el traje de metal.

Por supuesto que el personaje de Stark sigue siendo el mismo arrogante y carismático sujeto odiado y querido a partes iguales por lo cual la mala leche y los chistes socarrones están presentes y funcionan bastante bien (de nuevo vuelvo a pensar que esta cinta tiene ese espíritu de cinta de acción de los años ochenta y noventa por su construcción narrativa y al menos su servidor lo agradece). Así mismo también es un acierto que personajes secundarios como el del Coronel James Rhodes (Cheadle) y Pepper Potts (Paltrow) hayan ganado más relevancia en la historia y sirvan como verdadero apoyo a la trama, de hecho el personaje que interpreta Paltrow ahora tiene la oportunidad de mostrar sus dotes heroicos en la parte final del filme.

Ahora bien el villano o villanos en turno también son un gran acierto, aunque aquellos puristas del hombre de hierro se sentirán decepcionados al ver el tratamiento que se le ha dado al Mandarín, aunque su servidor cree que desde el punto de vista realista del filme este funciona a la perfección y el giro de tuerca final que se le implementa cierra su existencia bastante acertada en la cinta, al tiempo que Ben Kingsley demuestra lo buen actor que es y no tiene problema en resolver el personaje con todo y el cambio de tono que le exige el mismo. Incluso dicho personaje funciona como una alegoría sociopolítica de los tiempos que se están viviendo en el mundo (como sucediera en la primera cinta), aspecto que se refuerza cuando hace acto de aparición el verdadero villano de la función, un ser aún más peligroso por su falta de ética y escrúpulos (pues al menos el Mandarín reflejaba cierta ideología en su actuar).

Por supuesto la cinta cuenta con inspiradas escenas de acción (me parece bastante solvente la secuencia del pueblo donde Stark se enfrenta en una cantina a un sequito de ex soldados que quieren eliminarlo, o aquella secuencia donde Iron Man debe rescatar a una infinidad de personas que han caído al vacío desde un avión, es de lo mejor del filme) y los efectos especiales si bien brillan por estar bien diseñados jamás opacan a la historia. Ahora bien es innegable que la platilla de actores sigue manteniendo la química y camaradería entre estos (aspecto que se nota frente a pantalla), por lo cual todos sustentan el punto exacto en sus interpretaciones (aun los recién llegados como un exacto Guy Pearce y una Rebecca Hall  más que correcta) sin embargo está claro que Robert Downey Jr. sigue siendo el rey de la función con su exquisita interpretación de Tony Stark, motor de la cinta y por supuesto es de  agradecer que el histrión siga manteniendo la frescura del mismo sin caer en exageraciones ni autocomplacencias.

Downey Jr. en la Comic Con de San Diego California 
Ya para finalizar diré que recomiendo sin dudas Iron Man Three pues esta se descubre como  una buena secuela, la cual no decepciona en su visionado pues toma en serio al espectador; por lo cual se percibe como  entretenimiento puro y honesto, demostrando sorpresivamente que la maquina aún tiene  mucho que dar si  se sigue la línea que ha marcado Shane Black. Por cierto no dejen pasar la escena escondida al final de los créditos, la cual si bien no devela nada para futuras cintas de la Marvel, si se descubre como un divertido chascarrillo. Por cierto dedico esta entrada a cierta hermosa mujer a la cual quiero mucho quien con su compañía hizo que el visionado de la cinta se tornara más agradable.




4 comentarios:

  1. Entretenida, divertida y espectacular, pero mi preferida sigue siendo la primera parte. Creo que me esperaba más de Shane Black, uno de mis guionistas preferidos. Pero aun así es un blockbuster de los más digno.

    PD: Buena reseña.

    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Coincido plenamente con sus cometarios, Iron Man 3 entretiene y eso en ocasiones ya no se encuentra muy seguido en un blockbuster. Saludotes y gracias por sus comentarios

      Eliminar
  2. de verdad la recomienda Sr. Ronquillo??????????? a mi se me hizo muy simplona, sobre todo que el villano solo quisiera desquitarse por que lo dejaron plantado. En relacion Comic-pelicula no se decir nada por que nunca he leido los comics de Iron-man, pero en la serie de The Avengers Iron-man es el que siempre rescata al equipo y se enfrenta a un sin fin de enemigos y ahora resulta, que en la pelicula le quedaron ¡¿traumas?!...no entiendo es el heroe chido y aaaa, como sea, lo unico que me agrado fue la aparicion de Guy Pierce ( sale en la de Memento ) y que el guionista pusiera las mismas secuencias de accion que uso en las de arma mortal. atte: el feshhhh!!!!!!!!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mi estimado Fesh, primeramente gracias por los comentarios y pos seguir el blog. En lo referente a las impresiones de un servidor por supuesto que la recomiendo, como podrá ver el hilo conductor de lsa cintas de Marvel sigue siendo la continuidad entre estas (Ironman, Los Vengadores, etc.) por lo cual esta se hila a los sucesos de los vengadores. Por otra parte hay que decir que las cintas estan basadas en aspectos de su fuente original (el comic) por lo cual al trasladarse a otro medio como lo es el cine, pues se toman varias concesiones para que funcione la cinta, por ejemplo la encarnacion del mandarin.

      Por otra parte como bien dice, tal vez parezca simplon el planteamiento de venganza del personaje de Aldrich (Pearce), sin embargo el guion esta bien construido por lo cual este aspecto solo se descubre hasta el tercer acto entre tanto arco argumental, por lo cual es loable pues deja al espectador anclado a la historia. Asi mismo tambien es innegable que Shane Black sabe como dotar al filme de ritmo, por lo cual esta no se hac pesada y la verdad entretiene. Como dicen por ahi en ocasiones menos es mas y creo que la cinta de Black cumple el cometido de entretener a las audiencias sin pretensiones manidas.

      Y por ultimo las escenas de Arma Mortal!!! muy bien un aspecto reservado para cinefilos como usted mi estimado Fesh. Como siempre es un gusto saber que sigue el blog. De nuevo gracias por sus valiosas aportaciones, saludos.


      Eliminar